La Unión Europea ha dado un paso significativo hacia la soberanía digital y la resiliencia en comunicaciones al adjudicar la construcción de su propia constelación de satélites, IRIS², a un consorcio liderado por las empresas españolas SES, Eutelsat e Hispasat. Este proyecto, conocido como Infraestructura para “la Resiliencia, la Interconectividad y la Seguridad Satelital”, tiene un coste estimado de 6.000 millones de euros y busca proporcionar servicios de comunicación seguros y flexibles a toda Europa. La red de satélites, que incluirá más de 290 satélites en diferentes órbitas, estará operativa en 2030 y competirá con otras megaconstelaciones como Starlink de SpaceX y Kuiper de Amazon. Este es un hito crucial para la industria aeroespacial europea, que se posicionará a la vanguardia de la tecnología espacial y garantizará la autonomía estratégica de la UE en comunicaciones.
El principal objetivo de la constelación IRIS² es potenciar la conectividad y la seguridad de las comunicaciones en Europa, con especial énfasis en las áreas rurales y remotas donde la cobertura es deficiente. Esta red proporcionará servicios de banda ancha de alta velocidad, facilitando así a empresas y ciudadanos un acceso a Internet más rápido y eficiente. Además, IRIS² se empleará en aplicaciones gubernamentales y de defensa, ofreciendo una infraestructura segura y confiable para las comunicaciones críticas.
El consorcio liderado por SES, Eutelsat e Hispasat trabajará en estrecha colaboración con la Agencia Espacial Europea (ESA) y otros socios industriales europeos para llevar a cabo el proyecto IRIS². Esta colaboración permitirá aprovechar la experiencia y el conocimiento técnico de las empresas participantes, garantizando que la constelación se desarrolle de manera eficiente y cumpla con los más altos estándares de calidad y seguridad. Además, la ESA desempeñará un papel crucial en la coordinación del proyecto y en la supervisión de su implementación, asegurando que se cumplan los objetivos establecidos por la UE, que incluyen mejorar la infraestructura digital, aumentar la conectividad y asegurar la independencia tecnológica de Europa.
La construcción de la constelación IRIS² también representa una oportunidad importante para la industria aeroespacial europea, que se beneficiará del aumento de la demanda de tecnologías y servicios relacionados con los satélites. Además, la implementación de IRIS² fortalecerá la posición de Europa en el mercado global de telecomunicaciones y mejorará su capacidad para competir con otras regiones y empresas internacionales.
El lanzamiento de los satélites que conformarán la constelación IRIS² se llevará a cabo en varias fases, con el primer lanzamiento programado para 2025. Cada satélite contará con tecnologías avanzadas de comunicaciones y navegación, lo que permitirá ofrecer servicios de alta calidad y asegurar la interoperabilidad con otras infraestructuras satelitales existentes.
En resumen, liderado por empresas españolas y en colaboración con la Agencia Espacial Europea, el proyecto proporcionará servicios de comunicación seguros y resilientes a toda Europa, mejorando la conectividad y la seguridad en el continente. Con un coste estimado de 6.000 millones de euros y más de 290 satélites en diferentes órbitas, IRIS² competirá con otras megaconstelaciones globales y fortalecerá la posición de Europa en el mercado de telecomunicaciones.