La inversión en el sector espacial en España ha alcanzado niveles sin precedentes, registrando un aumento del 20% en comparación con el año pasado, según datos recientes. Este crecimiento se debe en gran medida a la creciente demanda de servicios satelitales y a la expansión de la industria aeroespacial en el país. La inversión total en el sector espacial español ha superado los 2.000 millones de euros, un claro reflejo del compromiso del gobierno y de las empresas privadas con el desarrollo de esta industria crucial.
En 2012, la inversión en el sector espacial en España rondaba los 1.600 millones de euros. A lo largo de los años, esta cifra ha ido creciendo, alcanzando una facturación de 867 millones de euros en 2018. En 2021, las empresas del sector espacial reportaron una facturación de 11.594 millones de euros, de los cuales un 47% fueron exportaciones. En 2022, la facturación total del mercado aeroespacial español, incluido el sector espacial, ascendió a 12,34 mil millones de euros. Estos datos muestran un crecimiento constante y significativo de la inversión y la facturación en el sector espacial en España.
La colaboración internacional ha sido un factor clave en este incremento de la inversión. España ha firmado varios acuerdos con otros países europeos y empresas internacionales para fomentar la investigación y el desarrollo en el sector espacial. Por ejemplo, la Alianza Espacial Ibérica con Portugal incluye la colaboración en la Constelación Atlántica, una red de satélites liderada por Satlantis Microsats y GEOSAT. Además, España ha participado en el proyecto COFSEP, financiado por la UE, que busca coordinar esfuerzos con otras agencias espaciales internacionales. También, la colaboración con la Agencia Espacial Japonesa (JAXA) en la misión EarthCare y la colaboración continua con la NASA en misiones como el seguimiento del rover Curiosity en Marte y la sonda New Horizons, han fortalecido la posición de España en la investigación espacial global.
El sector espacial en España también se ha beneficiado de la creciente demanda de servicios de telecomunicaciones y observación terrestre. Los satélites españoles se utilizan para una amplia gama de aplicaciones, desde la monitorización del clima y la gestión de recursos naturales hasta la prestación de servicios de internet y telefonía en zonas remotas. Ejemplos notables incluyen Spainsat NG, que proporciona comunicaciones estratégicas y cifradas para el Ejército Español; Paz, utilizado para la monitorización del clima y la gestión de recursos naturales; Hispasat 30W-6, que ofrece servicios de internet y telefonía en zonas remotas; XTAR-EUR, que proporciona servicios de comunicación segura y fiable para operaciones militares y humanitarias; y Sateliot, que forma parte de una constelación que ofrece conectividad IoT (Internet de las Cosas) de baja potencia.
Otro factor que ha impulsado el aumento de la inversión en el sector espacial español es el apoyo gubernamental a través de políticas y programas específicos. El Plan Nacional de Investigación Científica y Técnica (PNiCT) ha destinado aproximadamente 123 millones de euros a proyectos de investigación y desarrollo en el sector espacial, con el objetivo de posicionar a España como líder en Europa. Además, el gobierno ha incentivado la creación de parques tecnológicos y centros de innovación que fomentan la colaboración entre universidades, empresas y centros de investigación.
La inversión en el sector espacial también ha tenido un impacto positivo en la economía española, generando miles de empleos directos e indirectos. Regiones como Madrid, Cataluña y Andalucía se han beneficiado significativamente de este crecimiento, con un notable aumento en la demanda de ingenieros, científicos y técnicos especializados en el ámbito aeroespacial. Las instalaciones de investigación y desarrollo, junto con los parques tecnológicos y centros de innovación, han impulsado la creación de puestos de trabajo y han contribuido al desarrollo económico regional.